Salta, 7 de enero de 1853
De Gregoria, la madre a Adolfo, el hijo.
Por la que te escribe Sergio, verás los hermosos días de Pascuas que hemos pasado aquí, y confío en que el Señor me preste la vida para que el verano próximo tenga yo el placer de disfrutar con ustedes dos de los lindos paseos que se organizan en nuestro país. Tu tía Jacoba llegó ayer de Los Sauces, donde estuvo mes y medio, en casa de unas primas que Sergio ha conocido. Vuelvo encantada con el campo, las moras y la leche al pie de las vacas numerosas. En fin, un verano delicioso. Ya conocerás la abundancia de todo en nuestro país.